El 54 % de los participantes eligió que no y un 46 % optó por el regreso. La consulta dejó pareja la decisión y abrió nuevamente el debate. Desde la comuna negaron que la perrera regrese a las calles. Sin embargo, dicen que hay posiciones diferentes entre los propios miembros del ejecutivo. Hay preocupación por la cantidad de animales sueltos en los barrios del Partido.
La pregunta decía "¿Está de acuerdo en que vuelva a funcionar la perrera municipal?" y los lectores dejaron bien pareja la decisión. En este sentido, un 54 % de ellos opinó que el servicio no debe ser restaurado y un 46 % dejó constancia su preferencia afirmativa.
En el seno del palacio comunal las posiciones son dispares. Inclusive, en la misma área de zoonosis y bromatología habría diferencias de criterios aunque en los niveles más altos del ejecutivo negaron que el camión regrese a sus tareas.
La realidad es que hay muchos perros sueltos, inclusive de gran tamaño, en todas las calles del Partido con el peligro que ello representa para toda la comunidad. Cualquiera que haya caminado algunas cuadras de los barrios locales advertirá que nadie controla a los animales y que están, junto a los peatones "a las buenas de Dios". Una muestra más de lo que, como sociedad, nos importa el vecino.
