Lo de Cevige llegó a límites insospechados y también peligrosos. Según indica la gacetilla emitida por la cooperativa a los medios de comunicación, la suspensión se enmarca en una supuesta deuda monetaria. Ahora, las actividades del establecimiento corren peligro y el comedor social que funciona en el lugar se quedó sin energía.
En el marco de una nueva medida por parte de Cevige que traerá mucho de que hablar, claramente contra la comunidad en su conjunto, la cooperativa eléctrica de la ciudad cortó el suministro de energía a la escuea secundaria 6. Según indica la gacetilla emitida a los medios de comunicación, la suspensión se enmarca en una supuesta deuda monetaria. Ahora, las actividades del establecimiento corren peligro.
Según indicaron desde Cevige, "el día miércoles 13 la Cooperativa Eléctrica de Villa Gesell procedió a suspender el suministro de la Escuela Secundaria N°6 por la falta de pago. En un breve resumen de la situación debemos decir que antes del mes de agosto de 2018 el consumo de energía eléctrica era depositado directamente por la Dirección General de Cultura y Educación de la Provincia de Buenos Aires. A partir de dicho periodo se solicitó mediante nota que las facturas por energía eléctrica de los establecimientos educativos se enviaran al Consejo Escolar de Villa Gesell. Desde esa fecha los consumos de todos los establecimientos educativos de nuestra localidad registran deuda con esta distribuidora. Ante esta situación, el jueves se comunicaron telefónicamente miembros del Consejo Escolar manifestando que tenían los comprobantes de pago de los lugares indicados y que los acercarían, e informaron que en dicho lugar funcionaba un comedor. El viernes a primera hora y sin que adjunten los recibos correspondientes, la distribuidora procedió a reconectarle el servicio al establecimiento escolar de acuerdo a los fines que cumple el mismo. El Consejo Escolar debe dar cumplimiento a lo establecido en el Artículo 41 Inciso G de la Ley Provincial N°10.589 (conformar la factura por cobros de servicios públicos)".
Más allá de todo lo narrado por la empresa de servicios en el documento, la realidad es que son bastante selectivos para determinar a quién cortar y a quíen no. Le cortan a una escuela pública, donde funciona un comedor social y en breve comenzarían las clases del ciclo 2019 pero no hacen lo mismo con los cientos de hogares que viven colgados del servicio.
¿Y por qué hacen esto? porque al barrio hay que ir, enfrentar a los vecinos, y luego cortar. En cambio, en un colegio hay "pibes y docentes", que dificilmente impongan resistencia por la suspensión. Esta peleíta que Cevige está encarando con el intendente tiene este costo.
Cevige no tiene NINGUNA SENSIBILIDAD SOCIAL. No sólo no le importa lo que pasa a los vecinos, sino que NO LE IMPORTA VILLA GESELL. Cortar la energía en un colegio es similar a hacerlo en el hospital, todo con el pretexto de que existe deuda monetaria. Como si se pudiese medir todo con la misma vara. Pensemos entonces qué deberia hacer CAMMESA, la empresa que vende la energía a la cooperativa local, quienes registran una deuda de casi 200 millones de pesos. Sin palabras.
La manera de seleccionar los cortes por parte de Cevige es realmente una obra de arte. No sólo "pega" en escuelas, comedores y alrededores de los centros de salud, sino que también lo hace contra todo aquel que piense distinto a la empresa y lo manifieste.
Y sino, preguntenle a este redactor, que recibió varios avisos de corte de periodos abonados hace semanas por medios de pago habituales y habilitados, los mismos que se venían utilizando desde hace meses.
Parece que la crítica no le gusta a Cevige. Y si usted estaban pensando en escribir algo público, criticando el servicio, absténgase a hacerlo. Mire que Cevige le manda el aviso de corte rapidito.
