En el marco de una cobarde acción proselitista, con una mezquindad nunca vista, Baldo puso a los choferes del Ultimo Querandí como escudo de discurso político. Incluso, exponiendo a una mamá que perdió, en un accidente de transporte público, a lo más amado: un hijo. Una muestra de lo que puede hacer la locura por el poder, y por un voto.
El precandidato a intendente de "Juntos por el Cambio", Luis Baldo, recibió a María Lujan Rey, precandidata a diputada nacional en segundo lugar y madre de una de las víctimas de la tragedia ferroviaria de Once ocurrida en 2012. El tres veces intendente de la ciudad no tuvo reparos ni compasión en poner "en medio de la campaña" a las mujeres de los choferes del Ultimo Querandí que no continuaron en las empresas que se hicieron cargo del transporte en Villa Gesell luego de Gustavo Pereyra. Ni tampoco le tembló el pulso al exponer a una mamá que perdió a lo más amado: un hijo.
No sabemos con certeza si a Rey le contaron la verdad o la trajeron engañada. Lo cierto es que, quien aspira a ocupar un cargo en el Congreso Nacional, tuvo que visitar a las esposas de chóferes de la ex empresa "El Ultimo Querandi", que, por diferentes razones, no continuaron en tareas habituales, quienes le relataron la "conflictiva situación que les tocó atravesar". Es, sin ánimo de ofender a nadie -ni siquiera al mismísimo Luis Baldo- una cobarde acción proselitista, con una mezquindad nunca vista, donde se mezcla absolutamente todo por un voto. Jugar con la sensibilidad y el dolor de la gente sin trabajo, con el dolor de una madre que ahora no tiene a su hijo, sólo puede ser descripto con tres palabras de uso corriente en nuestro vocabulario vulgar que, seguramente el lector, entienda.
Al respecto de la visita de la precandidata, Baldo sostuvo: "es un honor para nosotros recibirla (a Rey) en nuestra comunidad sobre todo porque es el simbolo de una lucha importante como fue la lucha por la justicia por la Tragedia de Once, la cual terminó con funcionarios públicos presos. En esta pasada que generosamente nos dejó le quisimos mostrar, en un tema tan sensible como el transporte, como funciona en una localidad de la provincia un transporte que no tiene los controles que debería tener y que produce una inequidad como la que produjo¨.
Al ser consultado sobre el resultado de la reunión con las esposas de los ex chóferes, Baldo remarcó: "es un debate que todavía está inconcluso, venimos de participar de una maniobra que se hizo desde la municipalidad para evitar mejorar el transporte que lamentablemente esto no se vio traducido, ni en la mejora del servicio y menos con esa empresa que nos avergüenza como Nacus, que tuvo su punto de partida en una cooperativa de Jujuy y hoy esta empresa (por Nuevo Bus) que a nuestro entender esta haciendo mejor las cosas que la anterior pero que no resolvió uno de los graves problemas que nosotros tenemos que es que quedaron 60 familias sin trabajo, me parece que esto sigue, nosotros renovamos nuestro compromiso de que este contrato que va a vencer en marzo del 2020 sea desde lo que pretendemos, si la gente nos acompaña, un modelo en el cual la nueva licitación, la nueva empresa, vecinos nuestros que han trabajo mucho y que son los que mas saben de transporte, que son los trabajadores que manejaban los colectivos tengan ahí la posibilidad de ser ellos los que conduzcan a nuestros vecinos".
Por su lado, la precandidata manifestó: "he estado reunida con las esposas de ex trabajadores de la linea de colectivo Querandi, es una pena saber que se ha retrocedido y que se ha perdido un servicio público esencial como es el transporte, o que se ha precarizado o que hoy en vez de ir avanzando y ir dando cada vez mayor seguridad, mayor frecuencia que es lo que uno aspira en todos lados estemos viendo una realidad tan contraria".
Sea como fuera, y a pesar de que son opiniones discutibles las de los respectivos candidatos, Baldo debería recordar que fue él quien recomendó (incluso insistió mucho, valiéndose de la presidencia del HCD), para que la ciudad opere con EMSA, una empresa de Mar Chiquita, sin prácticamente micros, personal ni historial que respaldaran su futuro accionar. De hecho, meses después, la empresa quebró y tuvo que abandonar el único servicio de línea que poseía en esa ciudad balnearia. Pero eso no lo dice el tres veces intendente de la ciudad. Se ve que se le olvidó.
