Martes, 23 de Abril Villa Gesell

Opinión | Carta de Lectores

Carta sobre el fallecimiento de una niña de 9 años en un incendio

Es muy triste lo que pasó con la muerte de una inocente en un incendio en el sur. Me permito, por si son de utilidad, dejarles mis reflexiones como Bombero Voluntario ya retirado y a 600 kilómetros de distancia. Gracias. Me gustaría dejar en claro lo que siento a 600 kilómetros de distancia respecto de toda ésta locura que surge como corolario del fallecimiento trágico de una inocente de nueve años de edad.
Como Bombero Voluntario fuera de la actividad, quiero expresar claramente que ante la sirena que convoca, uno siempre sale hacia el Cuartel para llegar en el menor tiempo posible. Sigue el protocolo de ponerse el traje estructural y hacer ‘la parte que le corresponde’ para que la primera dotación vaya a prestar servicio de manera urgente. Sabemos que esos primeros minutos, los que se denominan ‘minutos de oro’ son fundamentales para comenzar a trabajar antes que el incendio se torne incontrolable o que alguna vida esté en riesgo. Cuando la dotación llega y alguien le dice que hay alguien atrapado, no conozco a ningún Bombero que haya pensado en sí mismo, en su propia integridad, ni en su familia. Entra y hace todo lo que puede (y a veces más) para salvar a quien sea, para arrancarlo de las garras de las llamas y sacarlo del lugar.
No entiendo por qué están tan empeñados en reclamar a los gloriosos Bomberos Voluntarios de Villa Gesell por la muerte de una inocente. El incendio fue a la madrugada. Como todo ser normal estaban durmiendo para trabajar al día siguiente, porque no tienen sueldo, tienen que trabajar para mantener a su familia. Y si hay una emergencia y son convocados, dejan todo para ayudar. Dejan su trabajo, la familia, el sueño. Todo.
De noche, siempre se tarda más en llegar al cuartel para luego salir. Nadie duerme vestido, pero los Bomberos Voluntarios siempre tienen una ‘muda’ de ropa al lado de la cama para éstos casos. Pero se pone el alma en llegar en el menor tiempo posible. A veces la moto no arranca, o ‘la bici’ tiene una rueda pinchada, y hay que llegar corriendo. Hay quienes arriban con un solo calzado en su apuro.
Y aquí cabe que me pregunte, que les pregunte: ¿Cómo comenzó el incendio? ¿Por qué se inició la combustión? ¿Qué se hizo cuando se tomó conocimiento de ello? ¿Quién llamó a los Bomberos?.
El mejor Bombero está en casa. Es quien hace todo para que, con prevención, no se desate un fuego que degenere luego en un incendio. Eso hay que conocer. POR QUÉ se produjo. POR QUÉ no se pudo evitar. CÓMO se actuó cuando se descubrió. QUÉ Y CÓMO se hizo para salir y sacar a todos fuera de las llamas.
Cuando el resultado es una muerte, hay que revisar toda la cadena para ver que eslabón no estuvo a la altura de las circunstancias. NO para cargar en él todas las culpas y expiar las propias. Sino para hacer que no vuelva a ocurrir. No debe existir carga más pesada en la mochila que tiene todo Bombero, que una muerte inocente que no se pudo evitar. Recuerden que los Bomberos son personas que dejan hasta sus vidas, para que otros vivan ….