Viernes, 29 de Marzo Villa Gesell

Opinión | Editoriales

Cevige destaca la respuesta ante problemas con el servicio... pero... ¿no es simplemente lo que tienen que hacer?

La cooperativa eléctrica de Villa Gesell ha dispuesto, hace algunos meses, y en plena pelea con el Gobierno local, una estrategia de comunicación distinta, para intentar ganarse la aceptación de la comunidad. En este sentido, utiliza el aparato de prensa propio (y también a los medios "amigos") para hacer llegar mensajes positivos y de esfuerzo que intentan resaltar la tarea de la guardia de emergencias y la cuadrilla de redes.

¿Cómo funciona esta estrategia? con cada salida de emergencia, por caídas de árboles, ramas, inconvenientes con los alimentadores o cualquier tipo de situación, la empresa enfoca el mensaje en destacar el trabajo de los empleados.

Este medio (a pesar de que muchos de los agentes que allí cumplen tareas crean que hay algo personal con ellos, y se enojen con la redacción de este portal) sostiene que los trabajadores de la cooperativa cumplen una función excelente. Están -como se dice en la jerga- "al píe del cañón" ante cada problema que ocurre con el servicio en la ciudad.

Eso no se critica en absoluto, incluso se reconoce el trabajo de los trabajadores de Cevige quienes, ciertamente, arriesgan su salud y su vida, manipulando redes de electricidad de media tensión, aún con lluvia, tormentas y cualquier situación que pueda entregar el clima.

Pero, la pregunta es la siguiente: ¿por qué la cooperativa comenzó ahora a mostrar este tipo de acciones? ¿No es lo que deberían hacer naturalmente, por ser la licitataria del servicio? ¿Pretenden que se aplauda la corrección de tensión?, ¿el restablecimiento de la energía cuando se corta?

Reiteramos. SECTOR INFORMATIVO reconoce y APLAUDE la tarea de los empleados, NO HAY NINGÚN TIPO DE PROBLEMA O CUESTIONAMIENTO CON ELLOS (a pesar de los insultos y amenazas diarias que recibimos por las redes sociales). Tampoco hay cuestionamientos con la empresa propiamente dicha....

Nuestra única preocupación, y temor, es que las autoridades de la empresa tal vez estuviesen poniendo a los empleados como escudo humano y de comunicación, como ejército (sin que ellos lo sepan realmente), para sostener una gestión interna que está, en los números y los hechos contables, en plena decadencia.

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