El equipo de comunicación del intendente busca la vuelta discursiva para que Rodríguez Erneta no quede como “el perdedor de la jornada”. Argumentan que Salas sólo le ganó a Tugnarelli porque en las PASO se elegían precandidatos dentro de los mismos espacios y no partidos políticos. Para la comuna, Martínez Salas nunca compitió con Llompart porque tenía, primero, que dirimir una interna partidaria. Hasta el momento, el jefe comunal nunca habló de “derrota”.
En la misma comunicación explican que la propuesta de precandidatos a concejales y consejeros escolares del FPV, la cual no tuvo competencia interna, obtuvo un "destacado apoyo de 5.400 votos" pero se ocupa, curiosamente, de destacar que Martínez Salas -quien logró el 38% de los sufragios, cerca de 6.300 votos- le ganó la interna a Mariela Tugnarelli -quien se quedó con 1.000 votos- haciendo referencia indirecta a que no perdió el intendente en su duelo político con Salas sino que el proceso formó parte de un elección para dirimir quien continuaba en las generales de octubre entre ambos espacios internos del radicalismo local.
Según la municipalidad, en esta instancia electoral no se opta por partidos políticos sino por los precandidatos que representarán, ya como candidatos, a los mismos en las elecciones del 27 de octubre. Así, cuando las listas tienen más de un representante -tal como fue el caso del Frente Progresista, Cívico y Social- se debe dirimir en internas abiertas y en el supuesto que no tengan, como el caso del Frente para la Victoria, deben superar el porcentaje mínimo establecido para continuar en carrera.
El fundamento municipal tiene un aspecto discurso inteligente. Intenta por sobre todas las cosas que el jefe comunal no sea visto como "el perdedor de la jornada". Tampoco pretenden que la lista de Martínez Salas no sea considerada ganadora, siempre y cuando la derrotada sea la facción interna de ese partido que no logró mayor cantidad de sufragios.
Esta no es la primera línea discursiva del tipo que propone la gestión de gobierno en el marco de las elecciones del 11 de agosto. El propio intendente municipal pronunció un discurso ante militantes, luego de confirmarse la victoria opositora, en donde en ningún momento habló de "derrota" o "inferioridad". Todo lo contrario, dijo que la campaña -al parecer "la verdadera"- recién inicia e instó a los seguidores a continuar el trabajo, ahora más fuerte que nunca.
