El sujeto prestó declaración indagatoria ante el fiscal de Pinamar, Juan Pablo Calderón, y recuperó la libertad condicional. Continuará imputado por el delito de "homicidio". Ahora, la justicia deberá determinar si disparó en legítima defensa.
Según informaron fuentes que trabajan en la investigación de la causa, el sujeto prestó declaración indagatoria ante el fiscal de Pinamar, Juan Pablo Calderón, y recuperó la libertad condicional (tiene que cumplir ciertas pautas con la justicia hasta que finalice el proceso) pero continuará imputado por el delito de "homicidio". Ahora, la justicia deberá determinar si disparó en legítima defensa.
El hecho ocurrió el martes por la noche en el apart hotel "El Remanso" de avenida 3 y paseo 133. Eran cerca de las 23.30 cuando el dueño del lugar estaba ya acostado y escuchó ruidos en el quincho. Esa situación le llamó la atención porque no había ningún huésped hospedándose en el lugar. Sospechando que podría tratarse de ladrones, el hombre se acercó al lugar con un revolver propio de tipo 38 mientras su mujer alertaba por teléfono a la policía.
Fueron solo algunos minutos con desenlace fatal. Al llegar al quincho observó dos sombras de personas que lo alumbraban con una linterna a la cuales les advirtió que ya habían sido descubiertas y que la policía estaba en camino. Fue allí cuando los delincuentes comenzaron a insultarlo y uno de ellos gritó "quemalo, quemalo".
Esa frase encendió la alarma absoluta en el sujeto. Con miedo a que lo maten, disparó hacia las sombras. Uno de las balas impactó en la nuca de un delincuente, el cual cayó abatido inmediatamente. El otro logró huir aunque ya estaría identificado por la policía.
