Son los residentes de los barrios Las Praderas, La Esperanza y Guaraní. Quieren llegar a un acuerdo con los dueños de los terrenos que hace años ocuparon para regularizar la situación. También solicitaron apertura de calles y servicios básicos con acceso legal.
El encuentro se desarrolló en el despacho privado del jefe comunal, quien recibió a los vecinos acompañado por el flamante secretario de Gobierno, Roberto Taboada, el director de Administración y Seguridad Legal y Técnica, Atilio Roncoroni y otros funcionarios que forman parte del Departamento Ejecutivo.
Los vecinos, a través de representantes de los barrios, explicaron sobre su principal inquietud relacionada con la problemática del déficit habitacional, lo cual los ha impulsado ha través de los años, a construir sus viviendas en terrenos de los cuales no son propietarios.
En este sentido, manifestaron sentirse discriminados y estigmatizados por tal situación la cual están dispuestos a regularizar buscando los acuerdos necesarios con los propietarios de las tres zonas donde se construyeron, ilegalmente, las viviendas.
Destacaron que se vieron claramente perjudicados en su imagen al estar involucrados por algunos medios periodísticos que los relacionaban con la llegada de camiones del Ministerio de Desarrollo Social, negando terminantemente que en estas unidades del Gobierno Nacional hayan arribado con gente y mucho menos ellos mismos, ya que todos acreditan haber llegado a esa situación hace ya en algunos casos 10, 20 y hasta 40 años.
Barrera escuchó atentamente las inquietudes y compartió la necesidad de trabajar para encontrar alguna solución a dicha problemática en el marco de la legalidad y atendiendo a sus derechos de acceso a una vivienda digna. Así, los vecinos plantearon también la necesidad de contar con iluminación, la apertura de algunas calles y el acceso legal a servicios básicos como la electricidad domiciliaria.