Regresarán a las aulas miles de alumnos que concurren a diversas instituciones públicas y privadas. Ocurre luego del parate total que causó el miedo al contagio de la gripe de tipo H1/N1. La concurrencia a las aulas había sido decretada a partir del 6 de julio y desde entonces la suspensión se sumó a las vacaciones de invierno. En total los alumnos estuvieron casi un mes sin clases.
El esquema causará diversas sensaciones. Para los padres será un alivio generalizado luego de tener a los chicos en casa, sin clases prácticamente un mes y con el dolor de cabeza que ello implica. En cambio, para los alumnos, aunque también será un dolor de cabeza, significa regresar a las aulas y recuperar el tiempo perdido en conocimiento.
Las clases habían sido suspendidas el 6 de julio por prevención y orden del gobierno provincial. Desde ese momento, se fueron sumando medidas más extremas para evitar contagios como la recomendación de no concurrir a lugares donde se aglomeraban personas.