Esa situación y grupo target con el que trabaja la ciudad no cambiará por el virus. Asumen entonces que los jóvenes se trasladarán a Gesell de todos modos y que las fiestas, en algún lado, se terminarán realizando.
Las autoridades policiales y de Seguridad de la ciudad están preocupadas. Es que, con el anuncio del Gobierno bonaerense en relación a la prohibición de apertura de discotecas, se complica el control de los jóvenes, quienes seguramente realizarán las fiestas nocturnas en la playa o en la vía pública.
Hace algunos días, la Gobernación de la provincia de Buenos Aires confirmó que no se habilitará la apertura de discotecas ni teatros en verano. Eso -sacando los teatros- es un verdadero problema para Villa Gesell debido a que es el destino "estrella" para los jóvenes que arriban en grupos desde todo el país. Si lugar de esparcimiento, será dificil controlar en un mismo lugar a toda la juventud.
Esa situación y grupo target con el que trabaja la ciudad no cambiará por el virus. Asumen entonces que los jóvenes se trasladarán a Gesell de todos modos y que las fiestas, en algún lado, se terminarán realizando.
Las mentes más abiertas dirán que entonces se deje disfrutar a los jóvenes en la playa, sobre la rambla o en la vereda. Pero esto trae aparejado un problema triple: el control policial sobre las juntadas al aire libre, la limpieza de la vía pública y la playa a las primera hora de la mañana cuando las familias se arriman al mar y la arena y el eterno problema de los ruidos molestos.
Sin ir mucho más allá del pensamiento lógico, hay que imaginar que, al lado de un grupo de jóvenes que arriba para pasar unas vacaciones soñadas de fiesta y salidas, podría alquilar una familia o un matrimonio mayor que no "vive de noche" y por el contrario disfruta desde muy temprano a la mañana.
