Durante los últimos días, las unidades amarillas distribuidas por la comuna fueron utilizadas como cestos de residuos, deshabilitando la función original por las que fueron colocadas oportunamente. Pidieron la colaboración de los residentes y turistas para que las larvitrampas cumplan su función.
En los últimos días, debido a que los reservorios han sido utilizados para arrojar residuos, el área colocó cartelería para informar sobre su correcto uso. Ahora, habrá que esperar para analizar el comportamiento de los turistas y residentes en relación al cuidado de las unidades y su real función: testear el mosquito del dengue, zika y chikungunya.
En ese sentido, desde el área solicitaron a la comunidad y visitantes evitar depositar basura en las larvitrampas, ya que su única función es la de juntar agua potable y posibles larvas de dengue, zika y chikungunya.