A medir por la temporada récord que vive toda la costa atlántica, es posible aventurarse a pronosticar un buen febrero, con menos gente que en enero pero igualmente viable para la microeconomía local.
Los oferentes de servicios de la ciudad esperan la llegada de febrero con moderación y expectativa. Aunque esperan la llegada de miles de turistas, se trata de un periodo que siempre es mirado de "reojo" porque su éxito es una verdadera lotería.
Desde la comuna no informaron índices de ocupación del segundo mes del año pero lo operadores de alojamiento de Gesell y las localidades del sur confían que, al menos los primeros 10 días, se mantendrá el índice de fuerte ocupación. Lo que suceda desde el 14 de febrero en adelante es una incógnita.
A medir por la temporada récord que vive toda la costa atlántica, es posible aventurarse a pronosticar un buen febrero, con menos gente que en enero pero igualmente viable para la microeconomía local.
En el medio, llegarán los carnavales y un fin de semana que le otorgará un impulso extra a la segunda quincena, siempre la menos beneficiada en materia de afluencia de visitantes. Podría ser el fin de semana largo (serán 4 jornadas, del 18 al 21 de febrero) que funcione como la frutilla turística de la torta.
