A Yeza no le tembló el pulso ni la voz para recibir al ex mandatario como una verdadera estrella. Y como no podía ser de otra manera, se mostró como un "hijo político" del líder neoliberal. Jugaron padel, recorrieron el frente costero e hicieron "face" para las cámaras y los que andaban por la calle de Pinamar.
El intendente de Pinamar, Martín Yeza, selló su alianza con el fracaso que representó el macrismo y Cambiemos durante sus cuatro (y únicos) años de gestión. Es que, el jefe comunal de Pinamar, recibió como una verdadera estrella al ex presidente Mauricio Macri, con quien compartió una jornada de padel, recorrida y vidriera social.
La visita de Macri a Pinamar representó un "todo" para el joven intendente de la vecina ciudad costera y sella -de alguna forma- su alianza con Cambiemos y Juntos por el Cambio, aún cuando fue el propio Macri -y Vidal en la provincia- quien generó un desastre económico y social como hacía décadas no se veía.
A Yeza no le tembló el pulso ni la voz para recibir al ex mandatario como una verdadera estrella. Y como no podía ser de otra manera, se mostró como un "hijo político" del líder neoliberal. Jugaron padel, recorrieron el frente costero e hicieron "face" para las cámaras y los que andaban por la calle de Pinamar.
Es cierto que Yeza ganó su reelección amparándose en el proyecto macrista, y también es cierto que la idiosincrasia pinamarense acompaña este tipo de Gobierno "top" y muy cancheros. De hecho, al peronismo le cuesta horrores imponerse y la única aparición fuerte fue la del ex intedente Roberto Porreti, destituído luego de asumir, al poco tiempo de arribar al municipio.
Entonces, que Macri visite Pinamar y que Yeza lo reciba prácticamente como un semi-dios responde a un visión que tiene una parte importante de la sociedad pinamarense.
Pero... ¿era necesario mostrarse de esa forma? ¿Con un dirigente que está en franca picada en la opinión pública y que, sólo pudo completar un mandato presidencial?
Yeza selló su pacto ¿con el diablo? (no lo decimos literalmente, tranquilos). Los que creen que esa afirmación es exagerada, al menos asuman que se mostró con un dirigente perdedor justo cuando se está por barajar la arena política para un 2021 donde habrá elecciones y la gente elige. Yeza es Cambiemos (con el desastre que esa fuerza política representa para la Argentina) y la visita de Macri terminó de confirmalo.
Agregamos este texto que difundió el Frente de Todos en sus redes sociales, solo para que no se olviden del "gran trabajo" de Mauricio..